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Republican presidential nominee former President Donald Trump speaks at a campaign rally at Grand Sierra Resort and Casino, Friday, Oct. 11, 2024, in Reno, Nev. (AP Photo/Julia Demaree Nikhinson)

ATLANTA (AP) — Donald Trump insiste en que el Proyecto 2025, un plan de casi 1.000 páginas para un giro hacia la derecha en el gobierno y la sociedad estadounidenses, no refleja sus prioridades para una segunda vuelta en la Casa Blanca.

«No lo he leído. No quiero leerlo, a propósito», dijo el candidato presidencial republicano el 10 de septiembre en el escenario del debate .

Sin embargo, desde la economía, la inmigración y la política educativa hasta los derechos civiles y los asuntos exteriores, hay ideas comunes y una ideología compartida entre el Proyecto 2025 y el esquema de Trump para otro mandato, desde su lista oficial de la “Agenda 47” , la plataforma republicana que él personalmente aprobó y sus otras declaraciones.

También hay diferencias: el Proyecto 2025, dirigido por la Fundación Heritage y escrito por muchos conservadores que trabajaron en o con la administración de Trump, ofrece más detalles sobre algunos temas que el ex presidente.

Las propuestas fiscales clave podrían beneficiar a los ricos

TRUMP: Sus políticas fiscales se inclinan en gran medida a favor de las corporaciones y los estadounidenses más ricos. Esto se debe principalmente a su promesa de extender su reforma de 2017 y reducir la tasa corporativa del 21% al 15%. También pondría fin a los impuestos de la Ley de Reducción de la Inflación que financian medidas energéticas destinadas a combatir el cambio climático. Dejando de lado esas ideas, Trump ha puesto más énfasis en sus planes dirigidos a los estadounidenses de clase trabajadora y media: eximir las propinas ganadas, los pagos de la Seguridad Social y los salarios de horas extras del impuesto sobre la renta. Su propuesta sobre las propinas, sin embargo, podría dar una exención fiscal indirecta a los asalariados más ricos al permitirles reclasificar parte de su salario como ingresos por propinas, una perspectiva que, en su forma más extrema, podría hacer que los administradores de fondos de cobertura o los principales abogados se aprovechen de una disposición que Trump presenta como una ayuda para los camareros de restaurantes, los cantineros y otros trabajadores del sector de servicios.

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