“El pueblo no se rinde, carajo», fue el grito de júbilo con el que los delegados indígenas y afro recibieron anoche la aprobación por parte de la COP16, en su plenaria de cierre, de dos iniciativas que les da un reconocimiento pleno y efectivo como actores claves en la protección de la biodiversidad. Estos dos acuerdos se suman a otro que ya había tenido luz verde el pasado miércoles.
“¡Histórico! Alcanzamos por consenso un gran acuerdo alrededor del artículo 8J con 3 grandes logros en la #COP16Colombia», escribió la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, en su cuenta de X, a las 11:43 de la noche.
Empoderamiento de pueblos indígenas
El primer acuerdo aprobado anoche, por consenso, es la creación de un órgano subsidiario de trabajo para pueblos indígenas y comunidades locales, en desarrollo del Artículo 8J del Convenio de Diversidad Biológica (CDB), lo que les da poder institucional a estas poblaciones.
Previo a la cumbre, la ministra de Ambiente colombiana había explicado que “tener un cuerpo subsidiario permanente en el Convenio quiere decir ser un organismo reconocido de forma permanente, lo que les dará más capacidad política de influencia y tener acceso directo a recursos internacionales que se destinen para ese plan de trabajo».
De acuerdo con la vocera de los pueblos indígenas durante la plenaria de anoche, Camila Paz Romero, “este nuevo órgano subsidiario es un referente para el resto del mundo, en el que las partes reconocen la necesidad continua de nuestra participación seria y efectiva para cumplir los objetivos y convenios».
Afrodescendientes, protagonistas de la biodiversidad
El segundo acuerdo aprobado anoche se refiere al reconocimiento de las comunidades afrodescendientes como actores fundamentales en el cuidado y la protección de la biodiversidad.
La aprobación de esta propuesta, liderada por Colombia y Brasil, les dará a las comunidades afro acceso a recibir recursos para financiar sus iniciativas enfocadas en la conservación y gestión sostenible de la biodiversidad.
También les permitirá participar en discusiones ambientales globales, como las próximas cumbres COP que se realizarán a nivel mundial.
Ruta de trabajo al 2030
Estos dos grandes logros se suman a la aprobación del programa de trabajo para pueblos indígenas y comunidades locales al 2030, acuerdo alcanzado el pasado miércoles en la plenaria de la COP16.
Al respecto, la ministra Muhamad había explicado, previo a la cumbre de Cali: “En la COP16 se va a decidir la aprobación del plan de trabajo para los próximos 10 años para pueblos indígenas y comunidades locales, que implicaría un acuerdo de cómo los gobiernos van a apoyar el trabajo de los pueblos indígenas, sus territorialidades, sus derechos, precisamente para que sean actores fundamentales en el cuidado de la diversidad biológica».
Se salda una deuda histórica
Al hacerse realidad de este anhelo, Muhamad, quien también es la presidenta de COP16, manifestó: “Con este hecho se reconoce el valor de los saberes tradicionales de los pueblos indígenas, afrodescendientes y comunidades locales y se salda una deuda histórica de 26 años».