El presidente ruso, Vladimir Putin, se reunirá esta semana con Xi Jinping de China, Narendra Modi de India, Recep Tayyip Erdogan de Turquía y Masoud Pezeshkian de Irán, desafiando las predicciones de que la guerra en Ucrania y una orden de arresto internacional convertirían a Putin en un paria.
Todos ellos estarán el martes en la ciudad rusa de Kazán para una reunión del bloque BRICS de economías en desarrollo.
La alianza, que pretende contrarrestar el orden mundial liderado por Occidente, inicialmente incluía a Brasil , Rusia, India, China y Sudáfrica, pero se está expandiendo rápidamente. Irán, Egipto, Etiopía, los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita se unieron en enero; Turquía , Azerbaiyán y Malasia presentaron solicitudes formales, y varios otros expresaron su deseo de ser miembros.
Los funcionarios rusos ya consideran que la reunión ha sido un gran éxito. El asesor de política exterior de Putin, Yuri Ushakov, dijo que 36 países confirmaron su participación y que más de 20 enviarán jefes de Estado. Putin mantendrá alrededor de 20 reuniones bilaterales, dijo Ushakov, y la cumbre podría convertirse en «el mayor evento de política exterior jamás celebrado» en suelo ruso.
Al margen de la cumbre, Putin también se reunirá el jueves con el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, según Ushakov. Será la primera visita a Rusia en más de dos años para Guterres, quien ha criticado repetidamente la guerra de Rusia en Ucrania.
Óptica y acuerdos para el Kremlin
Los analistas dicen que el Kremlin quiere la imagen de estar hombro con hombro con sus aliados globales en medio de las continuas tensiones con Occidente, así como la viabilidad de negociar acuerdos con ellos para apuntalar la economía de Rusia y su esfuerzo bélico.
Para los demás participantes, es una oportunidad de amplificar sus voces y narrativas.
“Lo bueno de los BRICS es que no te imponen demasiadas obligaciones”, dijo Alexander Gabuyev, director del Centro Carnegie Rusia Eurasia. “En realidad, no hay muchas condiciones para ser parte de los BRICS. Y al mismo tiempo, podrían surgir oportunidades interesantes, como simplemente pasar más tiempo cara a cara con todos estos líderes”.